
No sé hasta que punto nos volvemos invisibles al mundo, pero si es cierto que en ocasiones, nuestra presencia, llena un espacio.
Quizás somos más protagonistas de nuestra propia vida, disfrutamos de cada minuto, se que ya dejamos atrás a la princesa que un día fuimos, pero no le envidiamos nada. Nuestras arrugas son de experiencias vividas, risas compartidas, lágrimas derramadas, etc...

La joven que fui, la dejo atrás y yo sigo mi camino, ya no nos hacemos compañía, estoy muy orgullosa de ella, tenía ilusiones, fantasías que daban brillo a mi vida, ahora tengo sueños y fantasias diferentes, y los persigo con serenidad y tranquilidad, de manera diferente a mi etapa de juventud.
Ya soy una mujer madura, tomo el mando de mi vida, tengo los años que tengo, no me los escondo.
Cada etapa de la vida, tiene su encanto, y conforme pasan los años, adquiero experiencia.

Tenemos muy muy claro lo que no queremos.
Hemos dejado atrás la fase reproductiva, pasamos por la menopausia y seguimos, vivimos como una especie de liberación, nos adaptamos poco a poco, nos gustará.
Es fantástico sonreir y dejar que la gente se pregunte porque ....
Hace unos dias leí unas frases que me gustaron en facebookportadas y @bebeyamoroficial
- Amar, no es ocupar el lugar de nadie...sino crear un lugar que nadie pueda ocupar.
- El verdadero amor no se conoce por lo que exige, sino por lo que ofrece.
- Amor .. no es aquello que queremos sentir, sino aquello que sentimos sin querer.
- El problema no es el problema, el problema es nuestra actitud ante el.
- Lo que a veces parece un final, realmente es un comienzo.